ANÉCDOTAS DEL EUROPE CLUB 

En la noticia de hoy, Paloma Merino y José Antonio Alba van a compartir con nosotros algunas anécdotas que les han ocurrido durante su tiempo coordinando el Europe Club. 

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Entrevistador: ¿Qué anécdota nos puedes contar Paloma? 

Paloma: Bueno, cada movilidad ya es una anécdota en sí misma. Compartir momentos con los alumnos y otros compañeros fuera del colegio me parece una experiencia única. 

Por ejemplo, en la primera movilidad a Alemania, visitamos un campo de concentración y resultó ser una experiencia muy impactante. En el de Portugal tuvimos unos momentos muy divertidos al intentar hacer un menú español en un camping gas solamente. Tuvimos que improvisar. 

En el viaje a Dinamarca celebré mi cumpleaños allí y nunca olvidaré la fiesta sorpresa que me organizaron. En la movilidad a Holanda pude jugar al golf por primera vez y pasé un gran rato.  

Nunca olvidaré aquella actividad de cierre que hicimos el primer año en Cercedilla con los alumnos del Europe Club. Pasamos un par de días en un albergue diseñando las actividades de la siguiente movilidad. Recuerdo que trabajamos muchísimo, pero también nos reímos y disfrutamos un montón 

 

Entrevistador: ¿Y tú, José Antonio qué momento divertido nos puedes relatar? 

José Antonio: Bueno, esto fue en Copenhague, en el 2017 o por ahí. Era el primer proyecto Erasmus con alumnos. Durante esa movilidad, descubrimos un montón de lugares impresionantes durante las horas en las que descansábamos del trabajo. Y yo enviaba fotos a los profesores de aquellos ratos. Y al volver algunos pensaban que habíamos estado todo el rato de vacaciones 

Eso me hizo reflexionar y descubrí, que de cada foto que enviaba, dejaba cinco, seis u ocho del trabajo que realizábamos sin enviar, ya que las otras eran más impresionantes. Pero, como las del trabajo las consideramos más del día a día, más «habituales” … Si eran 14 horas en total durante el tiempo del proyecto, de las cuales, 3 eran de turismo, estábamos invisibilizando 11 horas de trabajo duro y dejando que las demás personas solo viesen 3 del total. 

Entonces, caí en la cuenta de que hay que tener cuidado con lo que compartes, ya que, esas imágenes pueden dar un mensaje u otro. Porque en Erasmus se disfruta mucho, pero también se trabaja muchísimo.